Cuando estamos presentando nuestros proyectos, tenemos la tendencia de recrear el proceso de solución de problemas que hemos usado—pudiendo ser la cronología de eventos que hemos seguido o la secuencia de análisis que usamos—para llegar con las conclusiones, y consecuentemente, con las recomendaciones. Las mejores prácticas indican que la mejor manera de hacer presentaciones es empezar con las recomendaciones—el mensaje que se acaba de escribir—y usar el tiempo que queda para decir a la audiencia por qué creemos que es la mejor recomendación. Esta diferencia la podemos ilustrar con la carta de Lucy a su amiga Shirley.
La siguiente es la carta de Lucy a su mejor amiga Shirley. Por unos momentos pónganse en los zapatos de Shirley e imagínense que está pasando por su cabeza mientras intenta saber qué es lo que Lucy le está intentando decir.
Querida Shirley,
¿Recuerdas el pasado sábado en la tarde cuando yo estaba jugando en el parque con mi novio y tú llegaste? Él me dijo que cuando no los veía tú lo besaste
¿Te acuerdas del domingo cuando tú llegaste a mi casa y mi mamá te hizo ensalada de atún y tu dijiste: “Guácala, esta es la peor ensalada que he probado en mi vida”?
¿Y ayer, cuando mi gato se te acercó y tú lo pateaste y lo amenazaste con que tu perro Satanás?
Bueno, pues por todas estas razones, te odio y ya no quiero ser tu amiga.
Lucy
Dense cuenta que cuando hemos leído el primer párrafo acerca de algo que pasó el sábado, no teníamos claro a dónde quería llegar Lucy. Así que leímos el segundo párrafo acerca de algo que pasó el domingo y luego a lo que pasó ayer. Y, si sumamos el primer, segundo y tercer párrafo podemos ver hacia donde llevaría el tema principal.
Esto fue el orden cronológico de los eventos. Miremos como queda mucho más claro y la carta puede ser mucho más efectiva, simple y con más impacto si la reescribimos de abajo hacia arriba.
Querida Shirley,
TE ODIO y te explicaré por qué:
1. Me robaste a mi novio
2. Insultaste a mi mamá
3. Espantaste a mi gato
No recomendamos que utilicemos este último estilo en nuestras relaciones sociales o familiares pero si lo recomendamos en documentos y presentaciones de negocios.
Tomado del libro de Gene Zelazny Say it with presentations